El pasado 13 de diciembre en Fibes, pudimos ver El chou de Lou desde primera fila. Si quieres saber más, sigue leyendo.
Y eso dijo ella...
La fama de Loulogio comenzó en
Youtube doblando anuncios como el de la Batamanta o escenas de películas,
programas, etc. Como La mejor escena de ninjas de la historia del cine, el Pajilleitor Plus o
el Hércules del chino.
Su carrera ha pasado desde Youtube, a la televisión y ahora a los
teatros realizando monólogos centrados en su vida, sus experiencias y sus
opiniones personales sobre la sociedad actual.
El Chou de Lou es un proyecto que lleva en pie desde hace casi dos
años, haciendo actuaciones desde Madrid y Barcelona, hasta ahora Andalucía.
Eso dijo ella quería ver desde primera mano porqué este tipo, lo menos
curioso, estaba logrando la fama que está consiguiendo. Queríamos ver si de
verdad el Lou de los videos seguía siendo el mismo en persona o incluso una
versión mejorada. Por ello no dudamos en acudir a su actuación y descubrimos que es más, mucho más que un simple Youtuber.
La actuación comenzaba a las
18:30 y tendría una duración aproximada de una hora y media. Pero en Sevilla,
sobretodo en Fibes, sino se da la nota con algo, no sería Sevilla. Por eso la actuación comenzó media
hora más tarde. Pero para el público aquello no fue ningún inconveniente porque
Lou demostró su profesionalidad y nos mantuvo entretenidos durante una hora
desde que entramos a las 18 en el recinto. Durante esa hora Lou saludó a
muchísimas personas, dio abrazos, hizo chistes y comentarios jocosos, habló por
teléfono con un fan y le sacó los colores a más de uno.
Una vez comenzó con el “monólogo” de su vida, todo fue
una sucesión de risas y aplausos, un autentico éxito vaya. Contó anécdotas de
los alumnos a los que en un pasado había dado clases de dibujo, mostrando
algunos de éstos, cada uno más siniestro y enfermizo que el anterior. Habló de
su tierra Cataluña y nos alagó de corazón. Hizo chistes soeces y grandiosos, e incluso nos mostró sus tesoros del chino.
EN DEFINITIVA
Loulogio es un cómico nada convencional, con una mente enfermiza pero brillante. Un artista del siglo XXI, muy humano y cercano con el punto justo de egocentrismo que puede tener un famoso.
Una actuación sensacional, fuera de lo común, risas aseguradas y un buen rato agradable, lo suficiente para desconectar de la rutina y aprender a reírse de la vida.
¿Valoración?
Un 10, totalmente recomendado a personas con un sentido del humor abierto en todos los sentidos.
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